martes, 28 de febrero de 2012
Levante mis vista y no pude sostener mi mirada ante la inmensidad de la tuya, no podía ya ni hablarte mientras la gente, la rutina pasaban y nosotros entre un silencio que decía demasiado, mi sonrisa tratando de sobornar a mi maldito nerviosismo, Mis labios con ganas de probar los tuyos y mis manos reclamaban la soberanía de tu cuerpo, pero mi cuerpo estaba inmóvil hasta que en un instante de tus labios sonó un te amo...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No
No seré yo quien te lleve las bolsas cuando vengas del mercado. No estaré por las mañanas cebandote ese mate que te traiga de nuevo acomod...
-
El domingo es unos de esos días donde me siento más triste, desde chico me pasa, el domingo tiene ese aire a tristeza, a melancolía, a recue...
-
Hoy recordé tu mirada, esa que lograba que la cordillera de mi alma se derrumbara ante un simple parpadeo, me acorde de nuestras charlas et...
-
Bien, siempre olvido decirte lo que realmente importa, siempre me quedo sin palabras cuando hablo contigo, son tantas cosas las que quiero c...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
colgados en la red